En enero de 1992 concertó una prueba con el Sheffield Wednesday de la Primera División, con el que tuvo solo un partido de fútbol indoor. Tras esa cesión no renovó con los italianos, poniendo punto final a su trayectoria en San Siro. En ese sentido, su asistente Gérard Houllier y el agente Dennis Roach intermediaron con los clubes británicos. Dos meses después, el seleccionador Henri Michel volvió a llamarle para dos partidos de la clasificación para la Eurocopa de 1988 en París: Noruega (1-1) y Alemania Oriental (0-1). Cuando ya llevaba 5 convocatorias, Cantona insultó a Michel por no haber sido convocado para un amistoso y la Federación Francesa de Fútbol decidió vetarlo de la selección durante un año.